HUMUS DE LOMBRIZ PARA EL VIÑEDO

APLICACIÓN DEL HUMUS DE LOMBRIZ EN VIÑEDO

El humus de lombriz en viñedo permite mejorar la calidad del vino, ya que regenera la tierra, mejorando su estructura y permitiendo el desarrollo de los microorganismos vivos. Evita el shock sufrido por las plantas en el trasplante, favorece y acelera el crecimiento de las raíces.

Los nutrientes minerales que contiene son liberados lentamente, y es capaz de incrementar la eficacia de los fertilizantes complementarios que se apliquen al cultivo.

Especialmente relevante resulta su capacidad de protección del cultivo a distintos niveles:

Permite mejorar la resistencia de los cultivos y la autodefensa frente a agresiones externas, como pueden ser las heladas y las sequías.

• Se ha demostrado su eficacia repeliendo diferentes plagas, debido a la producción de enzimas como la quitinasa por las lombrices, capaz de degradar la cubierta de quitina del exoesqueleto de los insectos.
• Es capaz de prevenir e inhibir enfermedades fúngicas como el oidio, la botritis o la yesca gracias a diversos mecanismos derivados de la intensa actividad microbiológica que posee.

Las dosis recomendadas para nuevas plantaciones son de 1 a 1’5 Kg de humus por cepa, de  aplicación localizada y preferiblemente en contacto con la raíz.

Durante el mantenimiento anual, se recomienda la aplicación de entre 1 y 3 toneladas de  humus por hectárea. Si se aplicara de forma localizada, las cantidades a aplicar estaría en torno a 1 Kg por metro lineal.

Se puede aplicar en cualquier momento, si bien se recomienda en los momentos previos a la  brotación, y durante el otoño. No existe riesgo de toxicidad para la planta.

APLICACIÓN DE HUMUS LÍQUIDO EN EL VIÑEDO

El humus líquido (o té de humus de lombriz), es un producto derivado del humus de lombriz.  Reproducimos en medio acuoso las poblaciones de microorganismos presentes en el humus, de manera que se facilite su aplicación y se obtengan todos los beneficios que aporta dicha microbiología de forma más rápida y eficiente.

Además es un producto rico en sustancias bioactivas y ácidos húmicos y fúlvicos, con  nutrientes solubles fácilmente disponibles para las plantas.

Para obtener un producto final todavía más eficaz, enriquecemos el humus líquido con  extracto de algas y purín de ortigas, un potente cóctel bioestimulante, fertilizante, fungicida e insecticida. Todos los ingredientes son de origen natural, sin contraindicaciones ni toxicidades para la planta.

El modo de aplicación puede ser foliar o mezclado con el agua de riego.

En caso de disponer de riego, se recomienda realizar una primera aplicación más intensiva  antes del período de brotación, y otras dos aplicaciones (bien al suelo, o aplicado foliarmente) en torno a mayo-junio y a mediados de verano. No aplicar las dos semanas previas a la vendimia.

Si no se dispone de riego, se recomienda igualmente realizar varias aplicaciones foliares a lo  largo de la campaña: durante la brotación, en torno a mayo-junio, y julio-agosto.

Las dosis oscilan entre los 25 – 40 L/Ha, en función del estado y necesidades del cultivo. Para  aplicaciones foliares, diluir entre 10 y 20 veces, para evitar posibles interferencias con la actividad fotosintética.

El humus líquido es un producto vivo, que elaboramos bajo demanda. Se recomienda su  consumo en los 7 días posteriores a su entrega.

¿QUÉ PRODUCTO NECESITO PARA MI VIÑEDO?

Tanto el humus de lombriz como el té de humus aportan enormes beneficios a los cultivos. El humus de lombriz está más indicado para aquellos casos que requieran de una aplicación de materia orgánica al terreno, así como mejorar su estructura, capacidad de retención de agua, etc.

El humus líquido, en cambio, es el producto más indicado si lo que buscas es un cultivo protegido y una cosecha de calidad. Su formato líquido hace que sea un producto más fácil de aplicar, y que sus efectos sean más inmediatos que los del humus de lombriz.

Desde Vermiduero lo que te recomendamos son aplicaciones anuales de humus líquido, intercaladas con aplicaciones cada 2-3 años de humus de lombriz, para tener un suelo vivo, sano y capaz de proporcionar cosechas de calidad.